Priyanshu Sharma
La aterosclerosis es una enfermedad inflamatoria crónica en la que el sistema inmunitario trabaja con factores de riesgo metabólicos para iniciar, propagar y activar lesiones vasculares. Es la principal causa de enfermedad isquémica de las arterias coronarias y enfermedad cerebrovascular. El infarto de miocardio o el accidente cerebrovascular isquémico pueden ser resultado de una trombosis arterial, una complicación aguda que aparece en la superficie de una placa ateromatosa desgarrada o como resultado de la erosión endotelial. El crecimiento y avance de las placas ateromatosas puede ser ayudado por las plaquetas, que son elementos biológicos importantes de los trombos oclusivos arteriales. Además, las plaquetas son esenciales para la hemostasia, el procedimiento fisiológico que detiene el sangrado después de un traumatismo tisular y una lesión vascular. Aunque la adhesión y activación de las plaquetas puede verse como una respuesta orientada a la reparación a la fisura o ruptura repentina de una placa ateromatosa, la progresión descontrolada de dicho proceso a través de una serie de bucles de amplificación autosostenidos puede dar lugar a la formación de un trombo intraluminal, oclusión vascular e isquemia o infarto transitorios. Debido a sus propiedades adhesivas y a su capacidad de activarse rápidamente en respuesta a una variedad de estímulos, las plaquetas pueden contribuir tanto a la hemostasia saludable como a la aterotrombosis. Al bloquear de forma selectiva importantes enzimas o receptores plaquetarios, los medicamentos antiplaquetarios que se encuentran actualmente en el mercado interfieren en pasos específicos del proceso de activación, lo que reduce el riesgo de trombosis arterial a través de mecanismos que no pueden separarse de un mayor riesgo de complicaciones hemorrágicas. Estudios aleatorizados muestran específicamente que la aspirina en dosis bajas puede prevenir la trombosis arterial en una variedad de situaciones, incluida la aparición de los primeros eventos vasculares en sujetos sanos de bajo riesgo y la recurrencia de eventos vasculares en pacientes con enfermedad vascular oclusiva aguda o crónica conocida. Con un enfoque en las ventajas y desventajas en diferentes poblaciones de pacientes, esta revisión tiene como objetivo reconciliar nuestro conocimiento actual del mecanismo de acción molecular de la aspirina con los hallazgos de los ensayos clínicos y las investigaciones epidemiológicas.