El tratamiento cardiovascular basado en evidencia tiene como objetivo mejorar la calidad y los resultados de la atención médica. A pesar de la solidez relativa de la base de evidencia que guía la atención cardíaca, muchas prácticas actuales para el tratamiento y la prevención secundaria de la enfermedad cardíaca coronaria son subóptimas y las desigualdades sustanciales en el tratamiento y el acceso siguen siendo comunes. El poder predictivo de los factores pronósticos.
La práctica basada en la evidencia también brinda oportunidades para que la atención de enfermería sea más individualizada, más efectiva, simplificada y dinámica y para maximizar los efectos del juicio clínico. Cuando la evidencia se utiliza para definir las mejores prácticas en lugar de respaldar las prácticas existentes, la atención de enfermería se mantiene al día con los últimos avances tecnológicos y aprovecha los nuevos desarrollos del conocimiento.